Cada vez que me llamas y dices mi nombre, cada vez que en un texto me llamas por mi apodo, cada vez que te apareces en mis sueños...
No estoy bien. Quiero dormir y no despertar, quiero renunciar a todo, en mi mente planeo una y otra vez como deshacerme de todos mis bienes materiales para poder salir de aquí.
La casa no se siente igual... yo no me siento igual... me siento incompleta, rota.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario