Asunción, Paraguay es dónde vive la familia de la novia de mi hermano, fuimos a conocerlos, ya llevan juntos un par de años y mi hermano que vive en Argentina parece estar muy seguro de que ahí se queda, así que, pues ya que estabamos tan "cerca", decidimos pasar a saludar, la familia resultó ser muy buena onda, al parecer quieren mucho a mi hermano y me la llevé bien con la hermana de la novia de mi hermano que tiene mi edad.
Asunción es una ciudad muy bonita, tiene el centro de la ciudad un poco abandonado, no hay mucho movimiento, es de esas ciudades en donde el centro no esta lleno de actividad, sino que es un área de actividad civica, nada mas. Visitamos el museo de trenes, que tiene la estación más vieja de latinoamérica, catedral, palacio de gobierno, las plazas principales, uno que otro centro comercial, una que otra iglesia, ah! y fuimos a... se me olvidó el nombre... pero es un pueblito a la orilla de un lago, donde hay casas muy grandes de familias ricas que se van a descansar en verano... bueno, eso era, hasta que empezó a ser invadida por pubertos ansiosos de alcohol y según entiendo, en verano parece mercado y ahora la gente ya no quiere ir, así que el pueblito de arriba, Altos (si, asi se llama, donde por cierto les recomiendo comer con Ñeca jaja un restaurantcito familiar de comida casera muy rico) empezó a ganar popularidad, así que ahora toda la gente rica ha comprado sus terrenos arriba del cerro para tener la vista al lago, pero sin la peste de los pubertos durante el verano.
En la poblacion a la orilla del lago hay un hotel muy grande y bonito, del mismo dueño que el Gran Hotel del Paraguay (en Asunción, que es donde nos hospedamos) al parecer esos dos hoteles son los mas viejos y famosos de la zona.
Asunción tiene problemas con la gente de la calle, es muchisima la gente que vive en las calles, de hecho, muchos tienen miedo de cuánto ha crecido la población que vive de esta forma, creanme, en México es poca la gente que se ve en las calles a comparación de esta ciudad, pero la misma gente tiene la culpa de que haya tantos y que sigan viviendo asi, en cada esquina se acercan personas a pedir dinero y la mayoria de la gente les da algo siempre, estas comiendo en un restaurante, y se acercan a tu mesa a pedirte lo que esta en tu plato, algunos incluso se quedan mucho tiempo parados junto a la mesa repitiendo como niño chiquito una y otra vez que quieren lo que estas comiendo, el problema, es que funciona, y la mayoria de la gente les da ¿no se dan cuenta que están impulsando el problema? si... pobre gente, no quiero sonar mamona, pero es muy molesto que suceda todo el tiempo y en todo lugar, y por otro lado, ¿que no pueden los meseros pedirle a estas personas que se retiren del lugar?
No es sólo el problema de la gente de la calle, sino que muchos se han instalado en casas de carton y lamina en las orillas del río, el único problema, es que el río tiene un potencial turistico y de desarrollo impresionante, que nadie se atreve a explotar ni visitar debido a estas invasiones de terreno. Lo que se me hizo más impresionante, es que, por la ventana de los edificios mas antiguos y bonitos de la ciudad, como el palacio de gobierno o el edificio cultural, puedes ver estas casas de carton, te alejas una cuadra de la catedral hacia el río y te das cuenta que no quieres caminar más allá.
¡Ya me acordé... San Bernandino, así se llama la población a la orilla del lago!
1 comentario:
q onda dianita..oie q wena redaxion tienez eh!! t zakz un 10..i pzz ta mui wenaz laz fotoz q to+t...i pzz kn lo algunoz kmntarioz q acz ztoi mui d akuerdo kntigo....ya q a vcz noz qjamoz d mchz kozaz, pro no noz damoz kuenta q nozotroz mizmoz laz provokmoz....
atte L@uR@
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